Actualmente la oferta de Ford se conforma de SUVs, Vans, Pickups, Vehículos comerciales y estos pueden -o no- contar con mecánicas eléctricas, pero, si buscamos una carrocería sedán simplemente la opción que se acercaría es el Pony car Mustang, sin embargo, pocos se atreverían a considerarlo como un vehículo de todos los días y esto por supuesto no porque sea un vehículo malo, sino, porque sus prestaciones no fueron ideadas para ser un vehículo familiar.
Ford decidió que, dentro de su plan comercial en el futuro inmediato, la carrocería tipo sedán no esta contemplada, siendo el icónico Fiesta el último guerrero en cesar su producción. Oficialmente fue el pasado 7 de julio cuando se canceló su producción.
No obstante, gracias a Volkswagen el carismático Fiesta podría tener un rápido regreso en el era de la electrificación y plantarse de frente con el contra VW ID.2 y el Cupra Raval, vehículos accesibles en cuanto a precio, que comenzarán a ser comercializados en el 2025.
Lo anterior fue confirmado en un encuentro con medios de comunicación por Martin Sander, jefe de la división de vehículos de pasajeros de Ford en Europa, quien además destacó que el Fiesta podría se construido con base en la plataforma MEB Entry de Volkswagen.
Fiesta no sería el único vehículo construido en colaboración con Volkswagen, recordemos que Ford firmó un acuerdo con el consorcio alemana que le permite utilizar la plataforma MEB en dos modelos de la marca desarrollados en exclusiva para el mercado europeo. Uno de ellos sabemos ya que será el SUV Explorer, que saldrá precisamente de la planta de Colonia en la que ahora se ha puesto fin a la producción del Fiesta. El Ford Explorer llegará a los concesionarios de la marca repartidos por Europa a principios de este próximo año con un precio que arrancará entorno a los $ 45 mil euros ($764,573 pesos mexicano al tipo de cambio).
