La flota del Vaticano esta lista para dar el salto evolutivo gracias al acuerdo con Volkswagen para hacerse de 40 vehículos 100% eléctricos de la familia ID., como el ID.3, el ID.4 o el ID.5, que serán entregados a principios de 2024.
De este modo, el Vaticano sigue con su estrategia de descarbonización, en un programa denominado ‘Reconversión Ecológica 2030’, cuyo objetivo es conseguir que la flota del Vaticano sea climáticamente neutra en 2030.
El Papamóvil, por el momento, no será Volkswagen
Por el momento, esta descarbonización excluye al vehículo más emblemático, el nombrado ‘Papamóvil’, el cual durante el mandato del Papa Francisco lo hemos visto a bordo de un Jeep, un Mercedes Clase M, un Clase G, también de la firma automotriz alemana, en incluso, Lamborghini le regaló un ejemplar, el cual no tenía como objetivo ser el vehículo del sumo Pontífice, sino que fue subastado con fines benéficos.
En cuanto a la descarbonización del Vaticano, la firma automotriz Volkswagen precisó, será un proceso paulatino. De este modo, sucesivamente, se entregarán otros vehículos ‘cero emisiones’ hasta que toda la flota se haya sustituido por completo en 2030.
Asimismo, como parte de este acuerdo, el Vaticano contará con una red de estaciones de carga eléctrica, e incluso, los empleados podrán utilizar estos vehículos como sus propios coches privados.
En este sentido, Imelda Labbé, miembro del Consejo de Administración de Ventas, Marketing y Posventa de Volkswagen detalló: “la electrificación de las flotas es cada vez más importante en todo el mundo. El hecho de que los empleados del Vaticano también vayan a formar parte de nuestros conductores ID. en el futuro es un gran objetivo y un honor para nuestra marca”.
El Estado de la Ciudad del Vaticano está firmemente comprometido con la aplicación de soluciones innovadoras y sostenibles que permitan reducir, en términos concretos, el impacto de las actividades humanas en el medio ambiente con el fin de proteger el planeta.