Reza el adagio que “a río revuelto, ganancia de pescadores” y frente al impactante cambio de reglas en la movilidad, la implementación de nuevas tecnologías que dieron paso a diseños únicamente vistos en la literatura de ficción, las empresas automotrices chinas están leyendo mejor las nuevas necesidades de los consumidores.
China está prácticamente innovando en cada segmento complicando el juego incluso a las marcas más posiciones como es el caso de BMW y Mercedes Benz quienes reportaron a sus accionistas un retroceso en ventas a nivel mundial.
En el caso específico de Mercedes Benz vendió a nivel mundial un 13% menos de vehículos entre julio y septiembre, al sumar un total de 541,000 unidades como consecuencia de un desplome de las ventas en China, esto argumentaron, se debió a un aumento “intenso de la competencia”.
La caída de ventas para BMW fue generalizada en todas las regiones donde opera, aunque el descenso en China fue de hasta el 30%, es decir, unos 148,000 vehículos. Por su parte, el mercado estadounidense tampoco fue benévolo ya que las operaciones descendieron un 9% (83,000 unidades). en Europa se firmó apenas un 1% de recorte, hasta las 219,000 unidades.
Hasta septiembre, las ventas de los modelos BMW y Mini retroceden un 13.1% en esta región, hasta las 523,638 unidades.
Hace un mes, desde Mercedes Benz alertaban de esta situación tras rebajar sus previsiones de beneficios por la debilidad de sus ventas en China, donde agrupa el mayor volumen de entregas.
