Podría sonar como mi abuelo cuando me decía: recuerdo que a tu edad teníamos que caminar kilómetros para ir a la escuela, no que los jóvenes de ahora todo lo quieren fácil, ya no se quieren esforzar por nada… y es quizá por esto que nos hemos acostumbrado a nuestros ídolos de microondas, las famas de” fast food”.
Un ejemplo de ello, los hijos de las celebridades a quienes la fama les ha llegado por el simple hecho de nacer en cuna de oro. ¿El talento? Es lo de menos, ellos son hermosos por la carga genética y si cantan actúan o modelan bien, es lo de menos, los seguidores y la lluvia de dólares están asegurados.
La inspiración para este tema surge a raíz de la pasarela de Victoria Secrets. Las “angelitas”, como les llaman a las modelos de la pasarela, tienen categorías que visualmente se distinguen por quienes tienen alas y quienes no, aunque para nosotros todas son hermosas.
Las alas, según las reglas de la pasarela, se las dan a las protagonistas de la noche, sí, aparentemente el clímax se da cuando ellas salen al escenario. Este año, este honor fue para las experimentadas Alessandra Ambrosio, Adriana Lima e Irina Shayk quienes compartieron la máxima categoría con Kendall Jenner.
No hablamos de un talento menor de una de las miembros del clan Kardashian, pero el camino para llegar a la noche de la pasarela de Victoria Secrets fue muy distinto para ella, no conoció el sacrificio, ella puede cantar o bailar y no dudamos que llene un estadio. ¿Pero es real el brillo?
Kaia Gerber con tan sólo 15 años de edad, la hija de la supermodelo Cindy Crawford fue nombrada Modelo Emergente del Año en los premios The Daily Front Row. En la misma semana también la escogieron como la nueva vocera de Marc Jacobs Beauty.
Hollywood frota sus manos para darle a ésta su primer protagónico, sin embargo, se dice que para Gerber aún no ha llegado el guión correcto para iniciar su carrera… y por favor olviden el casting, eso no es para ella.
De acuerdo a una biografía oficial, su padre pasó varias semanas que llegaron a contabilizar meses a las afueras del estadio del Manchester United pidiendo una oportunidad para ser tomado en cuenta. Así fue como David Beckham debutó a los 17 años. Su entrenador decía que no tenía el talento, sino la perseverancia que se convirtió en grandeza. Su precioso hijo, Romeo Beckham con tan sólo 14 años ya ha protagonizado dos campañas para la marca Burberry.
Romeo al igual que su hermano mayor Brooklyn Beckham -de 17 años- protagonizan el mundo de la moda, los anuncios espectaculares de muchas partes del mundo están protagonizados por sus bellos y famosos rostros. ¿Cómo demonios sabemos, que Brooklyn está saliendo con la actriz Chloë Grace Moretz, qué méritos hizo, por sí sólo, para que los medios nacionales y extranjeros nos bombardearan con su vida amorosa?
Ejemplos abundan: Willow y Jaden Smith, hijos de Will Smith; Cara Delevingne, hija de Charles Hamar Delevingne, magnate del negocio inmobiliario. Su hermana Poppy es una de las it girls más famosas de Reino Unido y sus antepasados ostentan el título de Sir. Por si sus raíces millonarias y aristocráticas no fueran suficiente, tiene por padrino a Nicholas Coleridge, presidente de Condé Nast Internacional, la editora de cabeceras como Vogue o Vanity Fair.
Y esperen a que los hijos de Brand Pitt y Angelina Jolie decidan ponerse a trabajar, sus padres, seguramente moverán todo el poder que cosecharon y que se ganaron con base a desilusiones, castings, esfuerzo y preparación.
Y con esto no queremos intentar boicotear a nadie, ni decimos que, para reír, primero haya que llorar. Lo único que pugnamos es porque el verdadero talento emerja; queremos conocer al verdadero sucesor de Tom Hanks, Clint Westwood, Leonardo DiCaprio o Meryl Streep.
No queremos que, en el futuro cercano, James Bond sea interpretado por Patrick Schwarzenegger…